AGUA LAS FIESTAS AL CAPITAL

No solemos tratar temas de índole religioso en este espacio, por qué tal y cómo hemos declarado en sucesivas ocasiones para nosotros la religión es una cuestión personal, pero cuando los aspectos religiosos se entremezclan con nuestras tradiciones y nuestra identidad cómo pueblo entonces si que creemos necesario alzar la voz.

Y es que este proceso de laicización de las fiestas navideñas nos parece ridículo, ésta etapa tan nuestra que combina tanto tradiciones paganas cómo cristianas esta siendo una victima más del mundialismo y su cultura estandarizante: se acabaron los villancicos y los belenes, se acabaron los ramilletes de acebo y las estrellas fugaces, se acabaron los reyes magos.... frente a ello se nos presenta una nueva navidad, de formas geometricas e insulsas, repleta de tibias imágenes yankis cómo el obeso Santa Claus de la Cocacola, una navidad despojada de valores tradicionales convertida a una monstruosidad consumista más, perfecta metáfora del rumbo vital que está tomando España en las últimas décadas. Y todo ello por no hablar de la condena a los signos religiosos ya que dicen, podrían ofender a gente de otras confesiones, curiosamente a nadie parece ofenderle ver al impresentable de Gallardón celebrando hanuka en Madrid, y también ilustra el hecho por todos sabidos de que el laicismo sólo funciona en una dirección.

Así que puesto que el capital nos jode las fiestas, vamos a joderle nosotros la suya, estas navidades enciende la llama de tus tradiciones, pasa tiempo con tus seres queridos, canta villancicos, brinda con caldos de la tierra y boicotea los templos capitalistas: los regalos en el comercio tradicional de tu barrio y ni un pie en el centro comercial o en las franquicias.